martes, 27 de enero de 2015

Frases que duelen

Yo nunca he sido muy consciente de que mis palabraspudieran herir a alguien. Siempre pensé que no pueden herir a nadie. Son solo palabras.
Con el tiempo me di cuenta de que a veces sí pueden herir, sobretodo la verdad. Supongo que es por lo que la gente miente a veces porque la realidad es demasiado dura.
Yo siempre pensando que a nadie les importa lo que diga y que decir la verdad es muy importante. Y sin embargo, estos días he descubierto que frasesaparentemente normales pueden herirme.
¡A mí! Yo que llevo toda mi vida siendo insultada  y tratada de forma vejatoria.
Pues sí, puede que las palabras duelan pero depende mucho de como lo digas y a quien.

Nadie debería de sentirse herido cuando alguien que no ye conoce de verdad te insulta. Sí, no es nada bonito pero tampoco es para llorar.
Esa gente no sabe como eres por lo cual no tiene ni idea de si es cierto o no.

Hay muchas formas de decir las cosas y yo siempre elijo la más directa. En eso creo que no he sido consciente de que puede herir a la gente. A veces hay que matizar o edulcorar la realidad, pese a que a mí me parece casi igual que mentir. Y odio mentir.

lunes, 26 de enero de 2015

Quedarse y luchar

Ahora estoy con más vitamina B y por lo cual con algo de ganas de vivir o por lo menos de no quedarme en casa todo el día.

Aunque como siempre da la sensación que mi cuerpo se opone a que tenga una vida normal.
Hoy me siento bien pero ayer por la noche mi cuerpo me dio una gran lección. Si estoy luchando por vivir no puedo morir. No ahí, no ahora.
Supongo que estar enferma ya no es una escusa, nadie me toma en serio.
No han pasado dos años, aún no he curado y la gente cree que la enfermedad se cura sola que la debilidad que tengo por los antibióticos está sólo en mi mente.
No ayuda nada hablar con ellos. Más bien al revés, te hacen sentir una incomprendida y que  tu salud por lo que estas luchando no importa, sólo importa parecer normal.

No soy normal, estoy enferma y hasta que noesté mejoseguiré estando enferma. ¿Por qué la gente no es capaz de verlo? ¿Es por qué la enfermedad está en el cerebro?
Tal vez si fuese una pierna rota o algo así podrían verlo pero no es tan visible y roza con tu estado anímico cambiándolo por completo.

Sigo enferma pero pienso hacer cosas cuando pueda pero no esforzarme mucho sólo lo justo. No quiero acabar con una crisis por exigirme más de lo que puedo.

lunes, 19 de enero de 2015

Empezar desde cero

Suena positivo pero no puedo... estoy en el mismo lugar y sin poder hacer nada más que enfermar.
Llevo casi todo el año enferma. Dieciséis días no es mucho pero esos días que apenas pude moverme, a veces hago esfuerzo porque estoy harta de estar en la cama enferma sin nada que hacer. Todo ello me recuerda que mi vida carece de valor.
Todos tienen su vida y yo solo una soledad profunda en el lugar donde debería de haber algo.
Lo único que pienso es que desde el principio debería de haber muerto. No veo sentido a seguir viva, sólo dolor y sufrimiento. Todos tienen algo por lo que vivir o viven pero, ¿yo que tengo? Nada.
Supongo que estoy pagando el precio de no haber tenido el valor suficiente para enfrentarme a la muerte.
Tenía tanto miedo y ahora lo único que tengo es sufrimiento. El miedo se fue, ya no me importa morir, no hay nada a lo que agarrarse... esos exámenes, fiestas, cumpleaños, etc. Yo ya no tengo de eso.
Soy yo sin poder moverme en una habitación, yo sola sin nadie que me apoye.

Mi muerte solo cambiaría la vida de mi perra y puede que a mejor. Yo no puedo sacarla desde hace tiempo y se merece vivir al aire libre y no estar encerrada. La estoy hundiendo conmigo.
Es bonito soñar con empezar una nueva vida en Alemania, nueva gente, nueva vida, nuevo idioma,  nuevas costumbres sin nada de lo que este aquí. Dejando todo atrás.
Suena muy bonito desde que tengo dieciséis años pero siempre he estado aquí y no creo que me vaya nunca.
Supongo que acabaré amargada y hundida hasta que un día ya no pueda más.

jueves, 15 de enero de 2015

No sé que hacer

El otro día por primera vez en mi vida y después de tantas y tantas telenovelas que vi me sentí como debería de sentirse el personaje de Sarita en Pasión de gavilanes el día que decide dejar su casa y a su madre porque ya era imposible vivir ahí.
Sus hermanas ya se habían ido mucho antes pero Sarita se quedó esperando que su madre entrará  en razón y se diera cuenta que su marido sólo la usaba por el dinero.
Ella fue la última en luchar por su madre y no querer abandonarla pero no le quedó otra.
Pues me siento así. Mi hermana va a hacer dos años que no se habla con mi madre y yo intento que vuelan a hablarse pero mi madre cada vez va a peor.
Su novio va primero, primero que ella, primero que sus hijas y primero que todo.
Y sé por experiencia que él la utiliza. No entra en razón, de ninguna manera. Ya no sé qué hacer.
Por ahora no quiero verla ni hablar con ella. Me hizo mucho daño.
Muy poca gente me puede hacer daño de verdad y ella es una que puede y lo está haciendo. No es cosa de un día, un mes o una temporada. Ya son más de dos años y sigue igual.
Ella dice que tiene que ser egoísta y pensar en ella porque nadie más o hará.
La escusa de todas las personas para hacer lo que les da la gana.
Yo muchas veces pensé en ella antes que en mí. Tuve que soportar el dolor yo sola y ser fuerte por ella.
He luchado mucho y no por mí. Mi vida nunca fue importante. Ahora estoy enferma, necesito apoyo y ayuda y no mi madre está ahí.
Los amigos lo entiendo en cierta medida, mi hermana vive fuera, mi padre sí me apoya y gracias a eso tengo a mi tía también.
Parte de la familia también desapareció el año pasado. No todos pero si algunos.
Aún me queda un tío por parte de mi madre pero él está peor que yo de salud. Supongo que entre enfermos nos entendemos mejor.

lunes, 12 de enero de 2015

Relatos cortos 2

Let her go

"Hoy reflexiono sobre el pasado, esas cosas que piensas que tal vez deberías de haber hecho pero no las hiciste y ahora ya no hay vuelta atrás. 

La recuerdo muy bien, solíamos ser amigas hasta que un día todo cambió. Tal vez el cambio fue poco a poco pero algo en ella cambió. No parecía la misma, estaba de una forma distinta. 
Se empezó a hundir, en el dolor y el sufrimiento. Tanto que te arrastraba con ella a ese mundo de dolor. 
Lo intenté pero no con todas mis fuerzas. Pero lo intenté, intenté ayudar, no mucho pero algo hice. 
Tal vez si hubiese sido distinto, si hubiera ayudado con todas mis fuerzas, tal vez y sólo tal vez las cosas ahora serían distintas.
Pero en su momento no pensé que fuera gran cosa, yo también tenía mi vida y mis problemas. Y no, no podía dejar que me hundiera a mi también.
Puede sonar egoísta pero ¿acaso sabía yo que seria tan grave? 
Ni siquiera se notaba, casi parecía normal, como siempre sólo que ella con su vida y yo con la mía. 
Sólo hoy puedo darme cuenta de sus llamadas de auxilio mientras se hundía en ese pozo lleno de sufrimiento y ni siquiera veo que fuesen para tanto. 
Una parte de mí se siente culpable, puede haber ayudado, haber hecho algo,  tal vez marcado la leve diferencia que hay entre el sufrimiento y la alegría. 

No sé, ya no lo sé y nunca lo sabré. Es demasiado tarde, ella ya no está. Acabó hundiéndose del todo y se fue. 

Y yo mientras sigo aquí planteando cosas ya imposibles, realidades paralelas donde ella esté y haya esperanza. Donde pueda ser otra persona más. Tal vez lo pienso para noTengo la culpa o tal vez lo haga para poder creer que todos tenemos la oportunidad de ser felices. 
Si estuviera aquí otra vez, no sé qué le diría... eramos amigas pero ya no,  hace mucho tiempo que no. Aún así estoy segura que un abrazo dirá todo lo que pienso ahora. sentirme culpable, aunque yo no tengo la culpa o tal vez lo haga para poder creer que todos tenemos la oportunidad de ser felices. 
Si pudiera estar aquí otra vez, no sé qué le diría... eramos amigas pero ya no, hace mucho tiempo que no. Aún así estoy segura quTengo la culpa o tal vez lo haga para poder creer que todos tenemos la oportunidad de ser felices. 
Si estuviera aquí otra vez, no sé qué le diría... eramos amigas pero ya no,  hace mucho tiempo que no. Aún así estoy segura que un abrazo dirá todo lo que pienso ahora.e un abrazo dirá todo lo que pienso ahora."

Relatos cortos

La oscuridad. 

"La oscuridad me rodea, está por todos los lados. Intentó gritar con todas mis fuerzas pero parece que no hay nadie más allá de la oscuridad.
Me pongo a correr en busca de cualquier luz por muy pequeña que sea.
Después de correr un buen rato, me paro. No veo nada más que la oscuridad.
Durante ese tiempo reflexiono y pienso, ¿qué había antes de la oscuridad? Apenas puedo recordar algo... pequeños recuerdos vienen a mí, es como si hubiesen sucedido en otra vida.
Recuerdo que fui feliz que no ne rendía que había esperanza, y en ese momento una pequeña luz aparece de la nada.
Voy corriendo hacia ella, recordando siempre lo que es sentir esperanza y ser feliz. La época antes de la oscuridad.
A través de esa luz veo gente pero por más que grito es como si no me oyeran...
Entonces recuerdo como apareció la oscuridad, recuerdo que aparté a la gente, que perdí la esperanza, que solo era triste...
Entonces me miro y veo que la oscuridad no está alrededor sino que es parte de mí. Es ahora lo que soy. 
Pierdo la esperanza, la luz se va y me quedo sola en esa oscuridad que yo creé, que es parte de mí."


sábado, 10 de enero de 2015

Homeless

Me gusta más la expresión en inglés que en español. Homeless, sin hogar.
Ahora mismo no la estoy usando con el significado de sin techo. Techo tengo pero no hogar.
Mi habitación es donde yo me envuelvo en mi mundo, siempre fue mi habitación pero nunca fue mía.
Llevo años teniendo que vivir en esta casa con mi madre pese a que ella me deja claro que todo es suyo, que ella paga todo y que no me pertenece nada.
Supongo que es algo normal, que te recuerden que no es tuyo y que si sigues aquí es porque quieres ya que eres bastante mayor para vivir por tu cuenta.
Tengo 25 años y una enfermedad que me impide tener una vida. Me hunde en una soledad perpetua y no me importa a veces pero cuando necesitas a alguien y ese alguien te abandona aunque se lo pidas por motivos egoístas, te hundes más.
Hace años que mi madre está así. Vivir con ella cuando estoy muy mal es un verdadero infierno del que no puedo escapar.
Ella me recuerda que tengo padre... como si el divorcio sirviese de escusa ya.
Mi padre vive en casa de su hermana mayor la que una vez me echó de su casa en un ataque de ansiedad pero es consciente de que si con ella lo puedo pasar mal con mi madre es peor.
Creo que soy la única tonta de mi familia que cree en la valores familiares.
Esta es la opción seguir sufriendo con mi madre día a día o vivir en casa de mi tía donde un día le puede dar un ataque y echarme.
Tengo lugares donde vivir, pero ninguno es mi hogar y aún no puedo tener mi propio lugar.
Como siempre pensé, mi vida está acabada si tengo que depender de alguien. Las personas son demasiado egoístas para luchar por la vida de otro. Todos somos unos egoístas que sólo pensamos en nosotros.
Mirar a otro lado es muy humano, es tan humano como el creerse superior a cualquier animal, planta o cosa Em general.
Sí, puede que tenga una habitación pero no es mía y me lo recordarán constantemente.
No tengo nada, lo cual me recuerda el verdadero valor que tiene mi vida, nada.
Ahora me enfrentó a un verdadero dilema.
Estoy enferma, más de lo habitual y para el colmo problemas y más problemas.
¿Por qué tengo que estar en el mundo real con sus problemas cuando ni siquiera puedo pensar o actuar con claridad? ¿No hay lugares donde puedes curar tu enfermedad sin que tengas que sufrir el día a día de la demás?
No me parece justo, creo que desde un principio debía de estar en un lugar lejos de mi vida donde poder curar sin todo este drama.
No puedo curar si sigo así, no merece la pena seguir así. No puedo parar de evitar en pensar si tal vez esto sea una causa para que la gente no cure.
En vez de estar en un lugar especificado en tu enfermedad tener que estar en una sociedad que la menosprecia y tener que soportar problemas que aún no puedes con ellos.

lunes, 5 de enero de 2015

Deberes

Hoy me han puesto deberes. Más bien recomendado hacer cosas por mi propio bien.
Después de varios días de casi persona normal, he de decir que tienen razón en parte. Sobre el psicólogo no, no quiero ni creo que necesite uno.
Pero sí sobre tener un trabajo o algo que hacer. Un propósito que seguir, algo por lo cual tenga que salir y levantarme todos los días.
Aunque creo que primero tengo que limpiar un poco todo el desastre en el que vivo desde hace meses o más.
La verdad que fácil es quejarse y no hacer nada y que difícil es pensar que todos los días voy a tener que hacer cosas.
Siempre me gustó la rutina pero hace muchos años que no puedo tener ninguna. Es un reto para mí pero un muy difícil, casi imposible. Pero es un nuevo año y quiero que mi vida valga para algo que no sea estar encerrada en casa odiando todo.

jueves, 1 de enero de 2015

2014

Empecé el año sabiendo que no era mi año para brillar, viendo como la gente lo hacía o lo hizo.
Sabia que iba a estar en un segundo plano, estoy enferma y no es una enfermedad que se cure fácil.
Al principio del año me di cuenta de todo el tiempo que había malgastado con gente que no merecía la pena como amigos. Al principio sentí odio, mucho pero ahora sé que sabía quienes eran y como eran,  así que fui una tonta al creer que la gente puede ser distinta.
Después mejoré mucho y viajé a Londres,  yo sola. Cuando soy yo misma no necesito a nadie puedo ser yo sola contra el mundo.
Luego el verano se hizo muy largo casi todos los días sola paseando a mi perra y sintiendo que no tenía ni con quien quedar para ir a la piscina.
Luego después de un tiempo me di cuenta que no estaba sola, mi enana estuvo conmigo todo el verano.  Entonces empecé a disfrutar de ver a esa perra corriendo por el parque.
En septiembre decidí que como estaba mejor intentaría estudiar pero al no estar curada no quise arriesgar y volver a la carrera.
Sólo fui un mes antes de que empeorará mi enfermedad, pero no paraba de pensar que lo que realmente quería era tener la carrera de física. Cada día en clase me daba cuenta que mi mente funciona como la de un científico y no una persona normal.
Así que pensaba volver si mejoraba al "módulo" aunque realmente se llama formación profesional.
Llegó mi cumpleaños, el peor día de mi cumpleaños. Estaba sola, enferma en el médico, no sabía nada de mi madre porque prefirió estar con el novio y por lo visto estaba tan grave que tuve que hacer un electrocardiograma.
Empeore más aún, pero por lo menos desde mi cumpleaños sabía que el corazón estaba bien aunque pareciera lo contrario.
A finales de año el médico me volvió al tratamiento anterior porque el nuevo me había destrozado.
No sólo tantos meses enferma me quitaron la opción de estudiar o poder pasear a mi perra. Muchos días no soportaba vivir.
Sino que me quitó la esperanza de curar algún día y después de una nochebuena  son familia en navidad sólo quería morir y lo intenté pero mi madre me paro.
Pensé que me dejaría en paz, pero tuvo que pararme.
Ahora no sé qué hacer pero estoy intentando vivir lo más posible porque nunca se sabe que día pueda volver a tener un ataque y esta vez no haya nadie para pararme.